Covid19, iatrogenia y autoinmunidad final

Este quizá es el momento más decisivo de todos para compartir información y ayudar a que nuestros familiares y amigos entiendan algunas cosas de vital importancia. Ahora que tanta gente en nuestro entorno y en todo el mundo está recibiendo presión para “vacunarse” estamos aún a tiempo de ayudar a despertar consciencias y evitar muchas situaciones dolorosas.

La Covid grave no es una enfermedad provocada por un agente biológico que se contagia, sino una enfermedad autoinmune. Por eso no afecta a los niños ni a las poblaciones poco o nada medicadas (en África y la mayor parte de Asia), porque cuanto más medicada está una persona, cuantos más productos industriales extraños se haya metido “entre pecho y espalda”, más posibilidades tiene de desarrollar complicaciones autoinmunes graves.

Especificamos “covid grave”, porque también importante entender que hasta ahora se ha magnificado el problema llamando “covid” a un montón de cosas diferentes, desde la simple gripe (que ha sido misteriosamente “erradicada”) hasta los efectos del gran aumento de las radiaciones electromagnéticas como la excitación electrónica del oxígeno mermando su biodisponibilidad metabólica, la desnaturalización de las porfirinas de la sangre y, en general, la inducción de cuadros muy similares a la gripe. Incluso gente sana o con todo tipo de cuadros clínicos, ya sean de sintomatología similar o completamente ajena, mientras den positivo en la PCR pasan a engrosar las listas oficiales de “contagios”.

Sin embargo, el cuadro clínico grave de la covid concuerda en todos sus detalles, como explica detalladamente en este informe que adelantamos la Doctora María José Martínez Albarracín, con una respuesta autoinmune a través de lo que se denomina “mejora dependiente de anticuerpos”, uno de los efectos secundarios a medio plazo, perfectamente descrito y conocido, de eso que llaman “vacunas”. La presencia de material genético o antigénico extraño acumulado en el cuerpo (especialmente abundante en las “vacunas antigripales” y ahora en la del covid) se vuelve peligrosa cuando el sistema inmune está más activo, como en procesos inflamatorios. La “tormenta de citoquinas” que causa una inflamación sistémica hiperaguda en todo el organismo afectando bilateralmente a los capilares pulmonares como se observa en la Covid grave, es un tipo de reacción autoinmune que ya se conocía y que ha ido en aumento en los últimos años.

Como explica el Doctor Enric Costa en su libro Iatrogenia, la medicina de la Bestiaeste tipo de enfermedades no existía antes de que emergiera la medicina industrial, y ambos fenómenos han experimentado un auge meteórico en las últimas décadas. Cuanto más medicada está una población, cuantos más productos antinaturales que interactúan íntimamente con el sistema inmune se mete en el cuerpo, especialmente si se inyectan directamente en sangre sin pasar por la capa protectora de nuestra microbiota intestinal, más enfermedades raras, casi todas de naturaleza autoinmune, se observan: artritis reumatoide, alergias, inmunodeficiencia adquirida, tormentas de citoquinas y un largo etcétera.

La “vacuna del covid”, con ARN mensajero de acción intracelular, es una práctica de altísimo riesgo que va a aumentar muchísimo las probabilidades de que las personas más vulnerables tengan una reacción autoinmune grave en un futuro próximo. La actual y agresiva campaña mundial de vacunación, que es sin duda el objetivo al que el poderoso lobby farmacéutico y la agenda globalista nos han querido llevar desde el principio, plantea consecuencias muy serias para la salud y la vida humana en nuestro planeta.

Este informe ha sido elaborado por María José Martínez Albarracín para el Dossier Covid 20, pero dada su importancia en estos momentos hemos decidido compartirlo y hacerlo público ya (el dossier completo está proyectado para salir a imprenta en abril). Gracias a todos por esa suma de pequeños y grandes esfuerzos, por hacer toda la masa crítica consciente posible, por nuestros seres queridos, nuestra gente, por todas nuestras relaciones.